Nombre común: Coccoloba uvifera
Nombre científico: Seagrape
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El Seagrape (Coccoloba uvifera) es un árbol de hoja perenne que crece en las zonas costeras de América Central y del Sur, así como en el Caribe. Se le conoce por sus grandes hojas redondas y sus racimos de bayas que cambian de color de verde a púrpura oscuro a medida que maduran.
Es una planta de gran tamaño, pudiendo alcanzar alturas de hasta 15 metros. Sus hojas son grandes, redondas, de color verde brillante y tienen un aspecto ceroso. Las bayas del Seagrape son comestibles y tienen un sabor similar al de la uva, de ahí su nombre.
El Seagrape es clasificado como una planta de la familia Polygonaceae y es nativo de las regiones tropicales y subtropicales. Crece en playas, dunas y bosques costeros, siendo resistente a la sal y capaz de tolerar la exposición al viento y al agua salada.
Esta planta requiere suelos bien drenados y con un alto contenido de nutrientes. Se adapta bien a suelos arenosos, pero también puede crecer en suelos más arcillosos. Necesita mucha luz solar y prefiere climas cálidos y húmedos.
El Seagrape es originario de las regiones costeras de América Central, del Sur y del Caribe. Es común en países como México, Belice, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, Venezuela, las Bahamas y las islas del Caribe.
Su cultivo se puede realizar a través de semillas o esquejes. Requiere cuidados regulares, como riego frecuente durante los períodos secos, fertilización y protección contra plagas y enfermedades comunes en plantas de clima cálido y húmedo.
Los usos del Seagrape van desde el ornamental, debido a la belleza de sus hojas y bayas, hasta el culinario, ya que las bayas son consumidas frescas o utilizadas para la producción de mermeladas, jaleas y vinos. Además, algunas comunidades costeras utilizan la corteza y las hojas en la medicina tradicional para tratar afecciones como la indigestión y las quemaduras.