carrasca (Quercus coccifera)

Información sobre carrasca (Quercus coccifera)

Quercus coccifera, también conocida como carrasca o encina carrasca, es una especie de roble mediterráneo que pertenece a la familia Fagaceae. Se trata de un árbol perennifolio que puede alcanzar una altura de entre 2 y 7 metros, con un diámetro de tronco de hasta 80 cm.

La carrasca es una planta leñosa de tipo árbol con hojas pequeñas y gruesas, de forma oblonga, con el margen dentado. Sus frutos son bellotas que maduran al segundo año y están protegidas por una cupula. Se clasifica como una especie arbustiva de hojas perennes.

Este árbol se encuentra principalmente en la región mediterránea, creciendo en áreas montañosas, laderas y terrenos rocosos. Se adapta bien a suelos pobres y secos. La carrasca forma parte del ecosistema forestal mediterráneo.

La carrasca prefiere crecer en suelos calcáreos y bien drenados, soportando bien la sequía y las altas temperaturas. Tolera periodos cortos de heladas, pero no soporta bien las temperaturas extremadamente bajas.

Se encuentra principalmente en la península Ibérica, el sur de Francia, Italia, Grecia y el norte de África. Se cultiva en viveros y su propagación se realiza por semilla.

El cultivo de la carrasca requiere pocos cuidados una vez establecida, ya que es una especie resistente. Es importante proporcionar riego durante los primeros años de vida para favorecer su establecimiento.

En cuanto a sus usos, la madera de carrasca es utilizada para la confección de muebles, construcción y leña. Además, su fruto, la bellota, es consumido por la fauna silvestre y tradicionalmente ha sido utilizado como alimento para el ganado por su alto contenido en nutrientes. En la actualidad, la carrasca es valorada por su papel en la conservación del suelo y la diversidad biológica, así como por su valor paisajístico.