Rhizophora mangle (Manglar)

Información sobre Rhizophora mangle (Manglar)

El Manglar Rhizophora mangle es una planta arbórea que crece en los manglares de las regiones tropicales y subtropicales de todo el mundo. Es una especie de planta de la familia Rhizophoraceae y es conocida por sus raíces aéreas que sobresalen del suelo.

El tamaño de la planta puede variar, pero generalmente alcanza alturas de 5 a 30 metros. Sus raíces aéreas, conocidas como «zancos», le permiten adaptarse a los suelos fangosos y pantanosos de los manglares.

Esta especie se clasifica como una planta halófita, es decir, una planta capaz de tolerar altas concentraciones de sal en el suelo y el agua. El manglar Rhizophora mangle es esencial para la formación y el mantenimiento de los ecosistemas de manglares, ya que proporciona protección contra la erosión costera y sirve como hábitat para numerosas especies de fauna.

El manglar Rhizophora mangle crece en los manglares costeros, donde las condiciones son salinas, húmedas y fangosas. Necesita suelos fangosos y agua salada para vivir, por lo que se encuentra comúnmente en áreas costeras y estuarios.

En términos de clima, el manglar Rhizophora mangle prefiere un clima tropical o subtropical, con temperaturas cálidas durante todo el año y altos niveles de humedad.

El origen de esta planta se encuentra en las regiones tropicales y subtropicales de América, pero actualmente se encuentra en todo el mundo, especialmente en Asia, África y Oceanía.

Los países donde es más común encontrar el manglar Rhizophora mangle incluyen Brasil, México, Ecuador, Costa Rica, Indonesia, Malasia, Tailandia, Australia y varios países de África.

En cuanto a su cultivo, el manglar Rhizophora mangle se puede propagar a partir de semillas o mediante esquejes. Requiere de suelos ricos en sedimentos fangosos y agua salada para su desarrollo. Los cuidados incluyen mantener la zona alrededor de las raíces húmeda y proteger la planta de herbívoros.

Los usos del manglar Rhizophora mangle son diversos, ya que sus raíces proporcionan hábitat para peces juveniles, crustáceos y otras especies marinas, contribuyendo así a la pesca sostenible. Además, sus raíces protegen las costas de la erosión causada por las mareas y tormentas, lo que ayuda a prevenir la pérdida de tierra. También se utiliza en la fabricación de productos farmacéuticos y cosméticos debido a sus propiedades medicinales y la extracción de taninos para el curtido de cuero.