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La olivilla o Teucrium fruticans es un arbusto perenne que pertenece a la familia de las Lamiaceae. Esta planta es originaria de la región mediterránea, por lo que se encuentra principalmente en países como España, Italia, Francia y Grecia.
La olivilla es un arbusto que suele crecer en áreas áridas y secas, como colinas pedregosas y laderas soleadas. Tiene un crecimiento compacto y puede alcanzar alturas de hasta 2 metros. Sus hojas son pequeñas y de un tono plateado grisáceo, con un aroma fuerte y agradable cuando se frotan.
Esta planta es resistente a la sequía y prefiere suelos bien drenados y con buen contenido de cal. En cuanto a las condiciones de luz, prefiere zonas soleadas, aunque puede tolerar algo de sombra. En cuanto al clima, la olivilla se puede encontrar en un clima mediterráneo, con veranos calurosos y secos y inviernos suaves.
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En España, la olivilla crece principalmente en zonas costeras y en las regiones del sur, como Andalucía y Valencia. Esta planta se utiliza comúnmente en jardinería debido a su resistencia y su capacidad para formar setos, pero también se puede encontrar de forma silvestre en terrenos rocosos.
Además de su uso ornamental, la olivilla también tiene propiedades medicinales y se ha utilizado en la medicina tradicional para tratar problemas respiratorios y digestivos. También se ha utilizado en la fabricación de aceites esenciales.
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