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El Diente de león, también conocido científicamente como Taraxacum officinale, es una planta herbácea perenne que pertenece a la familia de las Asteráceas. Es originaria de Europa y Asia, pero ha sido introducida en todo el mundo.
Esta planta crece en prados, campos, bordes de caminos, céspedes y jardines, preferentemente en suelos húmedos y bien drenados. Se caracteriza por su raíz pivotante y sus hojas dentadas de aspecto lobulado. Las flores son de color amarillo brillante y se disponen en inflorescencias compuestas por múltiples pequeñas cabezas.
El Diente de león es una planta resistente que prefiere climas templados y húmedos, pudiendo sobrevivir en condiciones de sequía. Es una planta que se adapta a diferentes tipos de suelos, aunque prefiere los suelos ricos en nutrientes.
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En España, el Diente de león crece en diversas regiones, especialmente en prados, campos y áreas rurales. También puede verse en bordes de caminos y parques.
En cuanto a sus usos, el Diente de león tiene propiedades medicinales y se utiliza en la medicina tradicional para tratar problemas de hígado, riñones y sistema digestivo. También se pueden recolectar las hojas jóvenes para consumirlas en ensaladas o cocinarlas como verdura. Además, las flores se pueden utilizar para hacer té o mermeladas. Por último, el Diente de león es una planta importante para la vida silvestre, ya que sus flores proveen alimento para abejas y otros insectos polinizadores.
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